La Orquesta y Coro JMJ: Música y espiritualidad

La Orquesta y Coro JMJ

Estos tres intérpretes forman parte de la Orquesta y Coro JMJ y, aparte de mencionar el buen ambiente del grupo y los vínculos que se forman, aunque unos sean más devotos que otros, cabe destacar que la principal motivación de entrar en la orquesta fue la fe católica. Los tres también resaltan el contexto del que surgió, el principio religioso, haciendo a la orquesta única. Destacan el buen ambiente y la gran combinación que ayuda a interpretar mejor las obras.

La inmensa mayoría de los integrantes de la OSC JMJ son creyentes. Los miembros del coro destacan el repertorio religioso y rezan un padrenuestro antes de cantar en los ensayos. Los instrumentistas destacan más el repertorio sinfónico.

El director de la OSC JMJ

Borja Quintas Melero es el Director Titular y Artístico de la Orquesta Sinfónica y Coro JMJ, Director Titular de la Joven Orquesta Sinfónica de Soria, Director del Teatro Russkaya Opera de Moscú, Director de la Orquesta de Cámara CSKG y Director Artístico del Coro de Niños de la Comunidad de Madrid. En España ha realizado una importante labor con jóvenes agrupaciones sinfónicas, incluyendo la Joven Orquesta Nacional de España, la Joven Orquesta de la Comunidad de Madrid y muchas otras. También ha dirigido agrupaciones corales como el Orfeón Donostiarra o la Escolanía de El Escorial.

Origen y desarrollo del proyecto

El proyecto de la Orquesta y Coro JMJ es una idea que surgió de Pedro Alfaro, el actual presidente de la asociación. En los preparativos de la Jornada Mundial de la Juventud de 2011, cuando se abordó el tema de cómo se haría la música, Pedro Alfaro presentó el proyecto al comité organizativo de la jornada: organizar a voluntarios para tocar en una orquesta sinfónica y en un coro en los actos principales de la JMJ. Fue aprobado, en vez de contratar una orquesta profesional, y era la primera vez que se hacía en este formato en una JMJ.

Se hizo un llamamiento para quien quisiera unirse y tocar para el Papa durante los cinco días de las jornadas. Y la respuesta fue masiva. Se presentaron aficionados orientados por un equipo de profesionales. Fue un proyecto muy ambicioso, cada sección de la orquesta tenía un jefe o profesor. Una vez hecha la selección, se llevó a cabo la siguiente fase, que abarcó desde marzo a junio, y consistió en ensayos semanales para que se crease el sonido de la orquesta. El primer concierto se presentó en junio en el Auditorio Nacional y luego se paró la actividad. En agosto, dos semanas antes de la JMJ, se volvieron a juntar para ensayar mañanas y tardes.

Una vez terminada la JMJ y viendo el impacto positivo que tuvo, no podían dejar parado el proyecto, y buscaron formas de seguir adelante. Encontraron una colaboración con el arzobispado, una aportación para que ellos pudieran mantener una estructura que sostuviera el trabajo hecho en esos seis primeros meses.

Y de ahí hasta hoy, funcionando como una orquesta joven, que se reúnen por encuentros o en periodos vacacionales, montando programas y manteniendo la ilusión de seguir formándose profesionalmente, haciendo obras de repertorio profano como sinfonías o conciertos y al mismo tiempo sirviendo al arzobispado en celebraciones litúrgicas.

El coro sigue trabajando semanalmente, los martes por la tarde ensayan y tiene también su utilidad paralela. El apoyo del arzobispado les permite tener esa pequeña estructura con dos personas en una la oficina para su gestión. Se desconoce el porvenir de la Orquesta y Coro, dado que no son una estructura que está metida en presupuestos públicos, y en consecuencia depende del arzobispo, o de financiación privada.

Música y espiritualidad en cualquier momento

La OSC JMJ ha grabado cuatro discos y cada uno tiene su historia. Borja Quintas afirma que su objetivo principal es estrenar y crear nuevo repertorio de música coral sacra. Llevan ya más de catorce estrenos de música y han hecho discos para un oratorio de navidad, para la misa de los mártires del siglo XX, o para la misa JMJ. El último disco llamado “Música y Oración” recopilaba música que la gente conocía y que la ayudaba a rezar, siendo también una herramienta que pueden usar las parroquias. Han arreglado para orquesta sinfónica distintos temas y los han grabado. Este disco precisamente se ha financiado por crowdfunding, ya que el arzobispado no pudo financiar la totalidad de la grabación, y fue una gran ayuda junto con la posterior venta de discos. El primer disco fue una recopilación con materiales grabados con anterioridad que se reunieron en un único CD. El segundo, “El Misterio de la Navidad: Nueve Villancicos y un Oratorio”, con poco dinero se consiguió hacer casi completo, con algún presupuesto que tenían propio. El tercer disco, “Misa de los Mártires del Siglo XX en España”, fue un encargo de la conferencia episcopal de medios, con un presupuesto concreto.

Estrenaron el 7 de abril de 2015 en el Auditorio Nacional, con motivo del V Centenario de Santa Teresa de Jesús, el encargo “Las Siete Moradas de Santa Teresa”, obra inspirada en el libro escrito por Santa Teresa.

Otros proyectos

MásQMúsica es el proyecto bandera fuera de la orquesta sinfónica y coro. Consiste en intentar ayudar musicalmente, porque económicamente es muy difícil. Llevan música para que la vida de cada persona sea mejor. Los propios intérpretes se organizan entre ellos, quedan cada cierto tiempo y crean grupos de cámara con o sin voces y van a hospitales o a residencias de ancianos para alegrar. También hacen una iniciativa parecida en el concierto de navidad, una sesión matinal abierta al público necesitado, gente que jamás ha pisado el suelo de un concierto y les regalan sentarse en una butaca y escuchar un concierto de navidad. Muchos se llevan una impresión fuerte, por lo novedoso. Tiene una repercusión social, y hacen un bien a la sociedad. Este tipo de actividades se va haciendo sobre la marcha, no está tan marcada por el calendario. “Lo que más me gusta de participar en otros proyectos es lo que uno mismo obtiene por lo que da, un aplauso lleno de satisfacción” afirma uno de los intérpretes.

La Orquesta y Coro JMJ no busca algo en concreto en los perfiles de los intérpretes, afirma Borja. Hacen una convocatoria anual de audiciones para que se presente quien quiera, sin requisitos. Y hay músicos de lo más diverso, los que se apuntan porque sienten una atmósfera que les gusta, otros porque son creyentes y viven su fe en la orquesta, otros porque quieren formarse musicalmente sin más, porque les atrae la oferta académica de la orquesta, otros porque han oído que las cosas se hacen bien y hay buena recepción, o por el compañerismo.

“Importan las personas”, afirma Nuria Martínez Díaz, miembro del Coro y quien habla también de la unión y el compromiso del grupo, “Es la esencia”. La música coral es el género que fomenta y permite la mayor participación a la hora de hacer música. Los miembros adornan rituales religiosos, celebrando eventos remarcables en la vida de su comunidad, inspirando y elevando a los oyentes, creando un instrumento único para los compositores, y al hacer esto han expresado lo más profundo del alma y forjado una identidad de la comunidad a la que pertenecen. En la música coral, dice Nuria Martínez, podemos expresarnos y encontrarnos por nosotros mismos, podemos formar unidades sociales que son potencialmente un microcosmos de una sociedad ideal, y al mismo tiempo descubrimos lo diverso que puede ser el mundo y celebrar esa diversidad y parecer uno. No cree que exista un mensaje más poderoso que ese en nuestros tiempos.

El origen de esta orquesta es único, nació en el seno de la Iglesia y eso ya la hace muy diferente, y quieren cuidar mucho la manera de hacer las cosas y el ambiente que se respira. Dado que el mundo de la música es tan competitivo y duro, ellos le intentan dar una dimensión más humana, de apoyo mutuo, que los intérpretes se sientan muy cómodos. Y con los medios con los que se mueven, que el trabajo esté lo mejor hecho posible, sin hacer nunca concesiones de que por tener poco presupuesto se hace peor. Hay mucha ambición profesional y musical.

Desde un inicio hasta la actualidad se trata de una institución claramente marcada por valores católicos y la gran mayoría de los integrantes afirman haber tomado interés en esta Orquesta y Coro por los valores católicos. La idea de Pedro Alfaro fue esa desde un principio, y los directores intentan transmitirla a los intérpretes.