El lado más cercano de Yago Mahúgo

Yago Mahúgo, músico madrileño que comenzó como pianista y que hoy en día es reconocido como clavecinista y pianofortista dedicado enteramente a la música barroca francesa.

El cambio de instrumento y de época musical surge cuando obtiene el Título Superior de Piano y viaja a Alemania para continuar sus estudios. Es allí donde entra en contacto con la música barroca interpretada con los instrumentos originales, como por ejemplo, el clave. Además de conocer otros aspectos del mundo musical como la gestión, la promoción, las grabaciones y el sonido, conocimientos que le servirán para sacar adelante sus trabajos y promocionarse de la mejor forma posible.

Ha sido profesor de Clave e Interpretación Histórica en el Conservatorio Superior de Badajoz, ha impartiendo cursos y conferencias en diferentes lugares de la geografía española y actualmente es profesor de la Escuela Superior de Música Reina Sofía e imparte cursos de máster en interpretación histórica, fortepiano y clave en el centro superior de enseñanza musical Katarina Gurska.

No solamente actúa como músico solista, sino que es componente, fundador y director del conjunto historicista Ímpetus, que es una formación dedicada exclusivamente a la interpretación de repertorio con instrumentos originales, con el cual se está dando a conocer con diversos conciertos por España y fuera de España, en lugares como Italia o incluso Brasil.

¿Por qué la música? ¿Por qué músico y no cocinero?

Una respuesta sencilla sería decir que es lo que he hecho siempre. Yo empecé con la música con 5 años y como es lo que he hecho siempre... Pero no es la respuesta real porque además de eso he hecho muchas cosas (sonido, informática...). La música es lo que llevaba, lo hacía bien. En tercero de BUP cogí ciencias, lo lógico hubiera sido coger letras si hubiese ido encaminado hacia el piano, pero cogí ciencias puras y dejé las letras porque tenía 16 años y no tenía claro lo que iba a hacer. Me atraían las comunicaciones, informática... y me fue muy bien. Pero en COU cogí letras porque sería más fácil de compaginar con el conservatorio.

Dentro del mundo de la música, te dedicas al barroco francés, ¿por qué?

Cuando fui a Alemania a estudiar piano conocí otro tipo de instrumentos y es cuando empecé a estudiar la música barroca. Antes había escuchado mucho y había tocado mucho la música de Bach, pero no me atraía en exceso hasta que la toqué en el instrumento para el cual está compuesta, entonces empecé a entender de la música y es como si empezase a entender el idioma, me atrajo y empecé a estudiarlo.

Abandonaste el piano por el clave y el pianoforte. ¿Qué tendría que suceder para que volvieses a la compañía de un piano?

Algo imposible. Que desapareciese la música que hago. Si desapareciese, volvería a Chopin y a Prokófiev. También si me propusiesen algo muy interesante. De volver al piano, volvería haciendo música de cámara y no como solista; me atrae más.

¿Y nunca has tenido miedo a la hora de irte a Alemania y cambiar el piano por el clave?

Bueno, algo de vértigo porque, por ejemplo, cuando decido dejar de estudiar más piano y comenzar a estudiar clave es un cambio. ¿Por qué lo hago? Porque me gustaba, me atraía más y podía seguir por mi camino o coger uno nuevo que es lo que decidí. Hay que tener también el espíritu de lanzarte a por ello, que no es fácil. Haber estudiado fuera me ha abierto los ojos a la hora de sentirme español pero ciudadano del mundo a la vez, de no tener miedo a tener irme a vivir a otro país.

Hace un par de años sufriste un ictus. ¿Qué supuso para ti la música en ese momento? ¿Qué sentimientos encontrados se pasaban por tu mente?

Por un lado la música es mi vida, era mi vida y por otro lado, no podía hacerla. Quería una cosa pero no podía hacerla.

¿Temiste no poder volver a tocar más?

Sí. Llegué a pensar "¿y ahora qué? ¿qué voy a hacer ahora?", porque llevaba toda la vida haciendo esto. Pensé entonces que tendría que dedicarme a otra cosa, pero no sabía a qué... Tendría que haber encontrado algo relacionado con la música obviamente, o bien la producción musical, realización de grabaciones, dirección orquestal, o incluso la docencia de manera interpretativa más que técnica, porque técnicamente no podía demostrar nada. Tendría que haber tirado por algo así, pero afortunadamente he conseguido tocar. Si me hubiera dedicado a algo fuera del mundo de la música...Soy profesor de buceo, por ejemplo, con lo cual a lo mejor habría tirado por ahí. Es algo muy bonito.

¿Qué consideras más complicado a la hora de poder vivir de la música: ser compositor o ser intérprete?

Ser compositor posiblemente es más difícil. Siempre es más difícil encontrar alguien que te encargue una obra.

Tú siempre hablas mucho de "suerte" y de que tu carrera musical y tu vida están muy estrechamente ligada a esa palabra... ¿por qué suerte y no constancia y trabajo? La suerte siempre hay que buscarla, ¿no?

Sí, estoy totalmente de acuerdo. Digo "suerte" porque es una manera de llamarlo, pero sí, claro, obviamente si no fuera constante y no hubiera estudiado, pues no hubiera tenido esa suerte. Es una mezcla de todo. Hay que trabajar para poder tener suerte. Pablo Picasso decía: "Cuando llegue la inspiración, que me encuentre trabajando".

En un momento de tu carrera musical cogiste las riendas y empezaste a moverte en el mundo de la gestión y la promoción. ¿De dónde surgió la idea de no esperar a que otros lo hagan por ti? ¿Cuáles han sido los impedimentos que has encontrado por el camino?

Tener suerte es el resultado de tomar las decisiones correctas en determinados momentos y yo creo que ahí también influye tener un poco de visión. En todo lo que he ido haciendo me ha ido bien. Hay que saber sortear las piedras que te encuentras por el camino, ¿cómo lo haces? pues intuitivamente porque tienes dos opciones: o me quedo quieto y no sigo, o me busco la vida para llegar. Si decides seguir no va a ser fácil. Yo volví de Alemania y me intenté abrir camino aquí y buscar conciertos. Tienes que llamar a muchas puertas y perder mucho tiempo buscando a los gestores y después de todo esto, uno no tiene la publicidad que es una cosa básica. Y pensé que si necesitaba publicidad tendría que buscarla.

Pero, ¿cómo se sabe dónde empezar, a quién acudir y, sobre todo, con qué herramientas contar?

Yo he sido absolutamente autodidacta. Uno es autodidacta por intuición, es como todo... Prueba/Error. Y se podrán cometer a veces errores muy tontos. Es complicado porque no hay ningún momento en la vida que te diga "vete por aquí", sino que tu vas abriendo camino como sea y llega un momento que llegas a un sitio, miras hacia atrás y te das cuenta de lo que has avanzado, pero no ha habido un momento en el recorrido en el que seas consciente de dónde estás. Además de la intuición, es necesario todo el conocimiento que tienes detrás porque es el que después te ayuda, pero tú no sabes que ese conocimiento te puede ser útil después. Por ejemplo, a mi me gusta mucho el tema de grabación técnica de sonido y demás. pero no estudie eso, aunque sí que pase muchas horas en un estudio de grabación en Alemania sin intención de grabarme mis discos en un futuro, pero surgió la posibilidad. Es un poco también por las casualidad que te va dando la vida. Destino, suerte.

Y llegado este punto en el que te encuentras, ¿podrías decirme qué es necesario conocer y cuál es el proceso más complicado dentro de la gestión y la producción?

Si estás llevando a un artista, siempre debes ser claro con él. Pero al revés también pasa, y sucede cuando el artista no cuenta con el agente. De hecho, hablando con una agente conocida, me contó que no quiere llevar artistas españoles y la explicación parece bastante lógica y es que, los españoles se la juegan, por eso tanto como gestor organizando conciertos o como agente de alguien, creo que hay que ser siempre coherente, educado y no ir por detrás, aunque económicamente salgas perdiendo en algo. Si a mí me llama alguien, llamo a mi agente para que se ponga en contacto con él. Y si vas a organizar un concierto el proceso más complicado muchas veces es el que menos esperas. Tú crees que va a ser complicado hablar con el promotor del concierto y conseguir la financiación y después te encuentras con otras dificultades. Por ejemplo, un día tenía concierto por la tarde y a las siete de la mañana me suena el teléfono y es mi corcertino de París, para decirme que no podía embarcar en el aeropuerto porque tenía que facturar el violín o comprar un billete para el violín y eso supone un gasto económico extra. Las cosas más inesperadas pueden pasar y tienes que saber resolverlas en el instante.

Tú mismo te encargaste del montaje del vídeo de "La Marcha de los Escitas". ¿Pensaste que tendría la repercusión que ha tenido en la red? ¿Crees que en el mundo actual es necesario que se patrocine el propio artista?

Para nada. De hecho me sigue llamando mucho la atención. Hice el video para poder mandarlo a algún promotor de conciertos, pensando que lo verían pocas personas. Hoy sí es necesario que el artista se auto-promocione. Tú antes tenías que mandar un CD y que lo escucharan, hoy en día lo más sencillo es hacer un clip, mucho más que mandar un CD. Si vas a pedir un concierto a alguien, antes mandabas una carta y ahora mandas un correo electrónico y como en el correo electrónico no hayas puesto un vídeo o un enlace de Spotify a un disco que ya hayas hecho no hay nada que hacer. Yo intento siempre ponerme en la piel de quien va a recibir el tema y hay que intentar llamar la atención sobre el resto.

Entonces, ¿consideras que la decisión de haber invertido en ti mismo, tiempo y dinero, ha llegado a dar sus frutos? ¿O aún queda mucho por hacer?

Queda mucho. Está dando frutos pero falta mucho. Ahora mi siguiente movimiento sería darme a conocer fuera de España y poder mover mi trabajo en otros lugares, pero todavía no sé cómo hacerlo. Es difícil porque no hay una persona que te lance fuera, sino que son muchos contactos pequeños que acaban haciendo que eso salga adelante y eso lleva mucho tiempo. Ahora me voy a Italia, ya he tocado en Brasil, solo falta ver si eso cala de alguna manera allí e interesa alguien. Todo es muy lento y cuestión de suerte.

La educación musical hoy está en decadencia y con esto la cultura musical se está perdiendo. ¿Cómo crees que se podría hacer llegar el conocimiento de otros instrumentos que no están en el ranking de la música actual y acercar con ellos la historia de la música a las nuevas generaciones?

Ayer, estando en clase, antes de que llegase mi alumno, estaba escuchando un video de Rameau y entró mientras lo estaba escuchando, así que le pregunte si escuchaba música y me respondió "bueno, a veces" y "¿qué tipo de música escuchas?" su respuesta fue "pop". Si los propios alumnos de conservatorio no escuchan música clásica, dime tú quién escucha música clásica. A mí, cuando me decían lo que iba a tocar, me faltaba tiempo para irme a comprarme todos esos discos. Es muy complicado acercar la música de antes a una sociedad de ahora, y como siempre, dependerá de la inquietud y del interés por conocer que tenga esa persona. Si fuese el clave, habría que intentar vender el instrumento de una manera que las nuevas generaciones pudieran entender, por ejemplo, poniéndoselo en unos cascos con notas largas muy rápidas, como si se tratase de un sintetizador nuevo y después mostrándoles el instrumento.

Y por último... quitando la música clásica a la que te dedicas. ¿Qué música o qué artista sueles escuchar y a quién no escucharías?

Me llama mucho la atención David Guetta y, ¿sabes por qué?, por sus mezclas. No es él, sino la forma de conseguir esas mezclas lo que me llama la atención. Y pensando en cantantes, Adele me gusta bastante. Por el contrario, no aguanto a Alejandro Sanz, porque me molesta escuchar canciones que suenen siempre iguales, pero a su vez, me llama mucho la atención aquel artista del que escuchando mínimamente algo, soy capaz de reconocerle, y no tiene que ser precisamente por tratarse de una música repetitiva.